Hay un truco infalible para que te dejen no pagar por adelantado: dar buena imagen. Yo por ejemplo, antes de asomar la nariz por la recepción, me pongo traje y corbata. Ah, y los zapatos, siempre relucientes. Mano de santo, oiga. Lo de los zapatos es importante, porque un día me dejé las chanclas y me pidieron dos días por adelantado. Volví al coche a buscar la cartera (no esperaba pagar, claro, llevaba mi corbata de la suerte) y aproveché para ponerme los zapatos, y al volver, me dijeron que daba igual, que lo pagara todo cuando me marchase.
También he observado que si además de traje y corbata llevas un maletín en la mano, te dejan pagar con cualquier clase de tarjeta, aunque no tengan ni terminal y expiden factura sin poner mala cara.
Son los pequeños secretos que todo campista experimentado conoce. Yo creo que les gusta más la gente con buena imagen. No se...